La evolución de los hábitos de consumo en la industria del tabaco está marcando una nueva era, donde el interés por alternativas menos dañinas se ha intensificado. Este cambio no solo refleja la adaptación de las empresas, sino también las expectativas cambiantes de los consumidores. En este contexto, es fundamental comprender el fenómeno del snus y su variante moderna, Zyn, así como su impacto en la sociedad y la salud pública.
La industria del tabaco y sus nuevas estrategias
Desde sus inicios, la industria tabacalera ha estado en constante búsqueda de nuevas oportunidades de mercado. A medida que las leyes sobre el consumo de tabaco se han endurecido en Occidente, las empresas se han visto obligadas a diversificar sus productos y buscar nuevas audiencias. Esto ha llevado a un enfoque renovado en países emergentes y en la exploración de alternativas menos perjudiciales para los consumidores.
Mientras que el consumo de cigarrillos tradicionales ha disminuido, la demanda de productos como los vapeadores y el snus ha aumentado. La industria ahora se enfrenta al reto de equilibrar la necesidad de generar ingresos con la responsabilidad social y la salud pública. En este sentido, el snus se ha convertido en un producto emblemático, especialmente en Suecia, donde su uso es culturalmente aceptado y ha demostrado ser una alternativa viable al tabaquismo convencional.
El snus es un producto de tabaco húmedo y molido que se coloca entre el labio y la encía. A diferencia de los cigarrillos, el snus no se fuma, sino que se absorbe a través de las mucosas orales. Su consumo ha sido parte de la cultura sueca durante siglos, y aunque está prohibido en la mayoría de los países europeos, Suecia ha mantenido su uso legal y popular.
Las características del snus son únicas y lo diferencian de otros productos de tabaco:
- Formato húmedo: El snus se presenta en forma de polvo húmedo que permite una liberación gradual de nicotina.
- Variedad de sabores: Se ofrece en diferentes sabores, lo que puede atraer a un público más amplio.
- Prohibido en Europa, excepto en Suecia: Aunque es popular en Suecia, su venta está restringida en otros países europeos.
El auge del snus se ha asociado con una reducción en el tabaquismo convencional en Suecia, lo que ha llevado a investigaciones sobre sus efectos en la salud en comparación con los cigarrillos.
Zyn: la alternativa sin tabaco
En respuesta al éxito del snus, Philip Morris adquirió Swedish Match, el principal fabricante de Zyn, en 2022. Zyn se presenta como una alternativa a base de nicotina, pero a diferencia del snus, no contiene tabaco. Esto lo convierte en un producto atractivo para aquellos que buscan evitar los efectos negativos asociados con el consumo de tabaco.
Las diferencias clave entre Zyn y el snus son las siguientes:
- Composición: Zyn no contiene tabaco, mientras que el snus sí.
- Formato: Zyn se presenta en bolsitas similares a las del snus, pero con una apariencia menos estigmatizada.
- Target de consumo: Zyn ha encontrado un público especialmente joven, con medio millón de jóvenes estadounidenses utilizándolo regularmente.
La facilidad de uso y la variedad de sabores de Zyn han contribuido a su popularidad, y se ha posicionado como un producto de estilo de vida para muchos consumidores.
Impacto en la salud pública y regulación
A pesar de que Zyn y otros productos similares se presentan como alternativas «más seguras», las autoridades de salud han alzado la voz sobre los riesgos asociados con el consumo de nicotina. La adicción a la nicotina es un hecho bien documentado y puede tener una serie de efectos adversos sobre la salud:
- Aumento de la presión arterial.
- Daños en los vasos sanguíneos.
- Riesgos de resistencia a la insulina.
- Aumento del riesgo de ataques cardíacos.
- Problemas en el desarrollo cerebral de adolescentes.
- Complicaciones para mujeres embarazadas.
Estudios recientes han señalado que el uso prolongado de Zyn puede llevar a enfermedades periodontales y daño gingival. La nicotina actúa como un vasoconstrictor, lo que puede afectar el flujo sanguíneo en las encías, aumentando la susceptibilidad a infecciones e inflamaciones.
El auge de productos como Zyn refleja una transformación en la cultura del consumo. En un mundo donde la productividad y el rendimiento son altamente valorados, muchos buscan estímulos que les ayuden a mantener el ritmo. El filósofo Byung-Chul Han ha señalado que esta «sociedad del logro» puede llevar a una sensación de vacío y desesperación, lo que puede impulsar a las personas a encontrar consuelo en productos como el snus y Zyn.
Esto plantea una cuestión importante: ¿estamos buscando soluciones temporales a problemas estructurales en la sociedad? La necesidad de encontrar un impulso en el día a día puede hacer que las personas sean más susceptibles a estos nuevos productos, en busca de una forma de enfrentar la presión constante.
Perspectivas futuras y desafíos
El futuro de productos como Zyn y el snus dependerá en gran medida de la investigación continua sobre sus efectos en la salud y de la regulación gubernamental. Mientras que algunos países buscan prohibir su venta, otros pueden ver en estos productos una oportunidad para reducir el tabaquismo convencional.
A medida que la conciencia pública sobre los riesgos asociados con la nicotina sigue creciendo, es crucial que los consumidores sean informados adecuadamente. La educación y la regulación serán esenciales para abordar este fenómeno y garantizar que las decisiones de consumo se tomen de manera informada.
En última instancia, la transición de productos de tabaco tradicionales a alternativas como Zyn y el snus no solo refleja un cambio en las preferencias de los consumidores, sino también una profunda transformación en la forma en que se percibe el consumo de nicotina en la sociedad actual.
Alberto Amador Tobaja: [email protected]


























