El arte tiene el poder de sanar, de conectar y de transformar realidades. En un mundo donde las emociones a menudo se sienten abrumadoras, especialmente para aquellos que enfrentan la adversidad de una enfermedad como el cáncer, surge una iniciativa que busca utilizar la creatividad como un medio de apoyo emocional. El proyecto Quásares, que ya ha comenzado a tomar forma, está incorporando nuevas voces que aportan sensibilidad y perspectiva a este diálogo vital.
En el marco de Quásares, dos artistas se unen a un esfuerzo colectivo centrado en las experiencias de los pacientes oncológicos: Adela Angulo, conocida en redes sociales como «Adela por dios», y Andrea Morán, documentalista sonora. Ambas artistas están comprometidas a crear obras que reflejan las vivencias de quienes enfrentan el cáncer, con el objetivo de brindar herramientas que favorezcan el bienestar emocional a través del arte.
Quásares: un enfoque innovador en la salud emocional
El proyecto Quásares: geografía emocional de pacientes oncológicos a través del arte, se apoya en una metodología revolucionaria conocida como Concomitentes, que fue desarrollada por el artista belga François Hers en 1990. Esta metodología busca involucrar a grupos de la sociedad civil en la creación de obras de arte que aborden problemáticas sociales y emocionales.
Financiado por la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), Quirónsalud y la Fundación Daniel y Nina Carasso, Quásares se está desarrollando en colaboración con los hospitales Quirónsalud Sagrado Corazón y Quirónsalud Infanta Luisa en Sevilla. La mediación cultural está liderada por Felipe G. Gil de ZEMOS98, quien coordina un grupo de trabajo multidisciplinario que incluye a oncólogos, enfermeros y pacientes, todos comprometidos a crear un espacio seguro para la expresión artística y emocional.
El papel de la mediación cultural en el proceso artístico
La mediación cultural en Quásares es fundamental para establecer un diálogo entre los artistas, los pacientes y los profesionales de la salud. Este proceso se inicia con la escucha activa y la empatía, donde se toman en cuenta las historias y sentimientos de quienes están atravesando el cáncer.
El equipo de trabajo se compone de diversas figuras, entre ellas:
- Samuel Fernández: responsable de la colección Quásares.
- Guadalupe Guerrero y Manuel Rodríguez: encargados de comunicación en Quirónsalud.
- Manuel González: oncólogo médico involucrado en el proyecto.
- María del Pilar Muñoz: enfermera que aporta su experiencia clínica.
- Inmaculada Malasaña: paciente que comparte su perspectiva.
- Julia Montañés y Juan Antonio Virizuela: oncólogos que contribuyen desde el ámbito médico.
Este enfoque colaborativo ha permitido que el proyecto tome forma desde marzo de 2024, conduciendo a la creación de dos obras significativas que serán desarrolladas por Angulo y Morán, a partir de las experiencias compartidas por los pacientes y el personal médico.
Creaciones artísticas en el camino hacia el bienestar
Desde un enfoque que prioriza el bienestar emocional, Adela Angulo y Andrea Morán están trabajando en piezas que buscan resonar con las vivencias de los pacientes. Estas obras no solo son expresiones artísticas, sino también herramientas de sanación:
- Adela Angulo: desde enero de 2025, la artista ha estado creando una serie de ilustraciones que abordan con humor y sensibilidad las emociones complejas que atraviesan muchas pacientes oncológicas. Su intención es desdramatizar la enfermedad, ofreciendo una mirada humana y empática que conecte con la realidad de quienes luchan contra el cáncer.
- Andrea Morán: uniendo fuerzas desde marzo de 2025, la documentalista está produciendo un documental sonoro que explora la geografía emocional de los pacientes. Su obra busca tejer un mapa de vivencias compartidas, favoreciendo un espacio de apoyo mutuo entre quienes enfrentan la enfermedad.
Un legado artístico en construcción
El proyecto Quásares va más allá de la creación de estas dos obras. También ha desarrollado una colección online que incluye más de 50 obras culturales relacionadas con el cáncer, accesibles para el público general a través de su página web. Además, se está preparando una estrategia de difusión que incluye ensayos visuales y sonoros, lo que permitirá ampliar el alcance del proyecto.
Una de las culminaciones del proyecto será un encuentro sobre cultura y salud que se celebrará en septiembre de 2025, donde se espera generar un espacio de reflexión sobre la intersección entre el arte y la oncología. Asimismo, se está preparando la publicación de un libro coral que reúna las sinergias y aprendizajes surgidos a lo largo del proceso, convirtiendo las experiencias compartidas en un legado duradero.
Impacto y futuro del proyecto Quásares
La incorporación de Adela Angulo y Andrea Morán al proyecto Quásares representa un paso adelante en la utilización del arte como vehículo de sanación y conexión emocional en el contexto oncológico. Al integrar las voces de los pacientes y el personal de salud, se fomenta un ambiente inclusivo y colaborativo que permite una mayor comprensión de la experiencia del cáncer.
Con cada ilustración y cada sonido, el proyecto busca no solo reflejar las realidades de los pacientes, sino también ofrecerles un espacio donde se sientan escuchados y comprendidos. Quásares pone de manifiesto que el arte puede ser un aliado poderoso en el camino hacia la recuperación emocional, un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, la creatividad puede iluminar el camino hacia la esperanza.


























